Para el líder libertario, el exceso del gasto se puede financiar con deuda, algo que calificó como una «atrocidad, porque es cargarle la fiesta del presente a las generaciones futuras». Otra opción es la emisión monetaria, fuertemente repudiada por los economistas liberales: «Genera inflación, redistribuye el ingreso castigando a los más vulnerables», remarcó. También se pueden subir los impuestos, para cubrir el gasto del déficit: «Una expropiación», opinó Milei. «Lo mire por donde lo mire, el déficit fiscal es una aberración», insistió.
Milei cargó contra la política impositiva del Gobierno y «el problema de las Leliqs»
Sobre la política impositiva del Gobierno peronista, que según Milei hizo que la recaudación crezca un 80% , enfatizó: «Todo contra el sector privado, porque la joda de la política sigue».
Para el libertario, la «inconsistencia más grosera» tiene que ver con la proyección del 60% de inflación: «¿Dónde viven? La inflación en Argentina vive continuamente acelerándose», expresó.
También citó al pensador económico Milton Friedman: «La inflación es siempre, y en todo lugar, un fenómeno monetario». Es decir, según esta mirada, Argentina tendría una constante escalada de precios por un exceso de emisión monetaria y baja demanda. Friedman es recordado por haber sido una clara influencia de los llamado «Chicago Boys», un grupo de economistas que impuso sus doctrinas en regímenes totalitarios, principalmente bajo la dictadura de Augusto Pinochet.
En el debate legislativo, Milei también dedicó unos momentos al «problema de las Leliqs», las letras de liquidez que emite el Banco Central. «Hoy son el doble que la base monetaria», alertó. «Y están pagando tasas del 100%, esto quiere decir que las Leliqs van a ser cuatro veces la base monetaria«, añadió.
Al respecto, anticipó que la suba general de precios podría dispararse a niveles extraordinarios: «Lo más probable, es que aún con una demanda de dinero estable, cosa que no se da en Argentina, y menos con estos niveles de inflación, la inflación podría viajar a niveles del 200%».
Para finalizar su discurso, gritó: «¡Por todas las inconsistencias, los problemas morales, los problemas técnicos y la montaña de aberraciones que dicen ustedes mismos [señaló a sus pares del recinto], nosotros vamos a rechazar este mamarracho nefasto!».
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